Todo lo que necesitas saber sobre los ERTE
¿Qué es un ERTE?
Las siglas de la palabra ERTE corresponden a Expediente de Regulación Temporal de Empleo y es una situación en la que se han visto afectados muchos negocios como consecuencia de la situación excepcional que estamos viviendo de la crisis del Coronavirus.
Cuando una empresa lo solicita es por que precisa una suspensión temporal del contrato de sus trabajadores. No se debe confundir con un ERE, donde el contrato se extingue definitivamente, no se suspende temporalmente. En el ERTE, los trabajadores recuperan su contrato de trabajo y condiciones cuando finalice la situación de Estado de Alarma y sus prórrogas.
Además en esta situación la empresa queda exenta del pago de cuotas de la Seguridad Social total o parcialmente en función del número de trabajadores que tengan.
Por otro lado, desde el punto de vista del trabajador, mientras esté asimilado a un ERTE no consume desempleo.
¿Qué cuantía corresponde al trabajador que se ve afectado por un ERTE?
Esta pregunta es difícil de contestar de manera genérica porque depende de diferentes variables. De manera sencilla podríamos decir que el trabajador afectado cobrará el 70% de la media de su base de cotización de los 6 meses anteriores a la situación del ERTE. A partir del séptimo mes el sueldo pasará a ser un 50% de la base de cotización.
¿Qué tipos existen?
Podemos diferenciar dos tipos de ERTE, en función de si la actividad laboral se suspende o se reduce.
En el caso de que se realice una reducción de la jornada laboral, debe ser siempre entre un mínimo del 10% y un máximo del 70% de la jornada habitual. En este caso, la empresa deberá pagar al trabajador la parte de sueldo acorde con la nueva jornada, y la Seguridad Social abonará el resto.
La otra opción será la suspensión temporal de la actividad laboral.
En cualquier caso se debe justificar la circunstancia de fuerza mayor que hace que sea necesario tomar esta medida y las consecuencias que suponen.
¿Puede una empresa ofrecer vacaciones en lugar de un ERTE?
Para obligar al trabajador a utilizar las vacaciones generadas no disfrutadas es necesario comunicarlo con al menos 2 meses de antelación, lo cual complica esta fórmula.
Recientemente se ha permitido la posibilidad de prolongar los ERTE hasta el 31 de enero de 2021, pero esto puede tener algunas consecuencias.
Por ejemplo, en caso de prórroga del ERTE sí que se consume el paro para el trabajador.
Tanto si eres un trabajador que se ha visto afectado por esta situación excepcional, como si eres el empresario que se está planteando la posibilidad de solicitarlo, recuerda contactar con asesores profesionales especializados en la materia para elegir la mejor opción para ti, para tu negocio y los tuyos.
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